Author: Empordà SUP Tripper
•15:39

  • Rider: Josep Parals
  • Spot: El sofá de su casa
  • Condiciones meteorologicas: Leer el texto o mirar la foto

  • Texto: Josep (Iª parte) // Saül (PD o IIª parte).

Ha caído en mis manos una revista de Skate: EROSION. No es que me guste el skate pero tampoco me desagrada. Esa revista no la compraría porque nunca lo he practicado seriamente ni aun cuando tenía 12 años pero lo primero que me llama la atención es la pasión con viven ese deporte los practicantes y los redactores que a su vez son practicantes. Si no, los textos no rezumarían esa sensación de que eso es su vida, lo cual es admirable.
Entre otras he leído un frase que me ha hecho pensar. Soy bastante adicto a este tipo de cosas, casi diría que soy un poco obsesivo. La frase en cuestión es: “con el tiempo se aprende a disfrutar de la vida cotidiana que es donde está la esencia”.

Y, bueno, pues eso me ha hecho reflexionar que no viene mal de vez en cuando. Hoy amaneció nublado, no ha salido el sol en todo el día, ha hecho un viento lo suficientemente flojo para no poder navegar pero suficientemente humedo para molestar, el mar totalmente plano, tengo un constipado considerable que prácticamente anula mi voz y la tos me persigue aunque a veces parece que desiste para volver más tarde, he asistido a una “calçotada” que me ha dejado bastante maltrecho para el resto del día pero a pesar de ello, como decía, tengo suficiente aliento para escribir estas líneas y para deciros que el día de hoy lo he disfrutado y además en compañía de amigos.

Estamos a final de mes de Febrero y como siempre aprovecho para mirar atrás para ver nuestra estadística de días en el agua en un mes de pleno invierno. Veo que han sido 16 dias y eso es mucho para un mes como este. Hoy no me he mojado y mucho me temo que mañana domingo, a tenor de lo que dicen las previsiones todavía menos, pero no importa; al mirar atrás veo que han sido muchos los días en que hemos salido al agua con nuestro remo y tabla y hemos disfrutado a pesar del frio, hemos estado en contacto con la naturaleza, hemos estado entre amigos, lo hemos pasado bien sin necesidad de irnos a cualquier sitio con calor.

No hemos ido a otro sitio porque no podíamos o porque no queríamos. . Y es que el que no se conforma es porque no quiere. Delante nuestro tenemos el mar que nos espera para que disfrutemos de la vida. Por enésima vez os queremos invitar a que descubráis el SUP porque os hara disfrutar de cada momento que estéis en el agua como no os podeis imaginar.

El SUP es bueno muy bueno para disfrutar de la vida cotidiana.

Josep

PD de Saül o quizás continuación del estado anímico de Josep:

Este texto se escribió antes de saber que algunos de stand-up-surf.com se van a Hawaii. No vamos a engañarnos, a mi me encantaría irme ahora mismo para allá, olvidarme del frio y de las condiciones pedo-caca-mediterráneas (aun con sus gratas sorpresas de vez en cuando) para encontrarme con palmeras, cocos, tangas de colores y todos los elementos típicamente hawaianos instaurados en el consciente colectivo (porque de inconsciente poco) del personal. Siento envidia sana de quienes tienen la suerte de poder hacer un viaje inalcanzable para muchos. Con lo cual olé y quiero ver las fotos ya!

Pero también es cierto que ante un suceso de tal magnitud a nivel surfero (ir a Hawaii…la meca) uno se hace planteamientos casi epicúreos, en el sentido de que ante la desesperación de no encontrar nada más que un charco de aceite a modo de mar, se redescubre el sentido de lo esencial, básico y estrictamente necesario para la felicidad, en gente que como yo, nosotros creemos encontrarla en forma de surfeada interminable.

Me paso la semana en un hospital ante personas que jamás volverán a ser personas porqué un tumor, una hemorragia, una enfermedad, un conductor borracho o lo que sea les arrancó de su cerebro la identidad y encima, dedico el tiempo con ellos a encontrar hasta el último detalle, la última secuela, la última palabra,…para llegar a conclusión que para nada són sinónimo de curaciones, haciéndome el fuertote y simpático para no echarme a llorar.



Entonces los días y las semanas terminan y nos reencontramos con el mar, con el Empordà, con mis frustrados intentos de ser Ferran Adrià, con las 50 pastillas toxicas que gasto cada vez que intento encender el fuego, aun haciendo calor, solo porque me gusta que este encendido, con los desayunos hipercalóricos que jamás llevaré a mi novia a la cama porqué me da pereza y aun así me siento un galán por haber comprado para mi 4 croissants + 1 ensaimada y para ella un cacaolat, con la tensa voz de Josep al teléfono sugiriendo que tiene esas 5322675352343 obligaciones imperdibles que siempre termina perdiendo, con las peripecias de Gerard recorriendo yo que sé cuantos quilómetros del monte a Barcelona y de Barcelona al mar y por supuesto, con las consultas obsesivas a todas las previsiones y sus lecturas e interpretaciones sesgadas siempre hacia la posibilidad de que aparezcan imposibles olas perfectas que nunca llegan. Y ahí está la clave de todo: Ni siquiera es necesario que lleguen. Su búsqueda, su espera, las expectativas, el SUP, el windsurf, todo eso solo es la excusa.

Y es que solo el poder pasar un día nublado, triste y agotado, mirando un mar como un plato pero entendiendo su significado, mirando hacia atrás y ver vida, mirar hacia delante y ver ganas, con o sin olas, es suficiente. Aun habiendo disfrutado como nunca del mejor día de olas o del viento más fuerte, de una surfeada interminable o un salto estratosférico, en los días grises y deprimentes si abres un poco la mente eres capaz de entender que el mar como un plato puede ser suficiente.

Saül





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1 comentarios:

On 4 de marzo de 2009, 7:29 , Anónimo dijo...

pero cuando realmente te vas a surfear, windsurfear, remar, hacer unos chapuzones, o simplemente contemplar el OCEANO (diferenciémoslo de MAR), te transmite tal temple, serenidad, fobias, energia y un sinfín de abanicos de sensaciones, que se disipan de vuelta a la CALMACHICHA del Mediterráneo. Tal vez sea una estratégia adaptativa para que los surfistas (soñadores y sedentarios) no desaparezcan de este litoral.

SHAKA PÚ!