Author: Empordà SUP Tripper
•7:21

Después de la pelea que mantuve ayer con el frio y el mar y aun habiéndome convencido de que nada había sido patético, una sesión de reconciliación se me antojaba indispensable para encarar la semana con buen humor.

Durante la noche del sábado había invertido varias horas en ver millones de videos de surf, stand up, windsurf, etc en condiciones inhumanas: Artic surfing, Belharra, Jaws, Waimea…¡vaya panda de nenazas estamos hechos!

Domingo, despierto muy pronto, demasiado o no. Surgen dilemas tales como “Si voy ahora quizás hace demasiado frío pero las olas están mejor que luego…”. Nada, asumo lo que hay y decido doparme con chocolate caliente, bollos y café.

Un par de horas más tarde es el momento óptimo. Ha salido el sol, estamos a 5ºC y aunque hace un frío considerable estos dos grados más se sienten como si estuviésemos en primavera. Llegando a Pals veo a Josep volviendo de la playa, mal rollo, o no hay olas o no le apetece meterse en el agua, o está mal….Que va, Josep ha ido ver como estaba el mar sin la tabla, y por su cara y nervios deduzco que lo que ha visto merece la pena. Va a por ella y vuelve volando.

El mar se ha ordenado, un suave terral es capaz de hacer milagros en Pals. Las olas que ayer rompían en Pekín siguen estando ahí pero metamorfoseadas por el mistral tienen una forma completamente distinta. Ayer quizás era innecesario entrar, hoy seria de tonto profundo no hacerlo.


Pals, como casi siempre, engaña. Lo que uno siente y ve desde la arena y nada más entrar tiene muy poco que ver con lo que sucede a lo lejos, allí donde muchos no van. Los primeros metros son pura corriente y shorebrake, rabia, impotencia, remadas en vano…luego llega la calma y el orden.

Es impresionante constatar la potencia acumulada en estas olas, 2 o 3 veces más pequeñas que los semi monstruos de la última sesión en la Fosca, pero igual de potentes.

Aquí, en días como hoy, donde los errores no los pagas tragándote la arena del fondo, la velocidad y anticipación del Sup permite surfear las distintas y siempre cambiantes secciones de cada ola sin sufrir demasiado por el impredecible momento en que la ola cerrará de golpe.

Josep se congela mientras yo ni pienso en el frío, es lo bueno de haber entrado ayer…¡hoy parece el Caribe! Así, profundamente enamorado de mi nueva Ron House, uso cada ola para probar nuevas posiciones, presión aquí, allá, etc.

Tras poco más de dos horas de Sup completamente solos tenemos suficiente. Sin patetismos, sin autoengaños, hoy ha estado bien, muy bien.
This entry was posted on 7:21 and is filed under , , , , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.